Agustín Arpa es un joven barcelonés y dropshipper de 26 años. Aunque solo lleva 3 años dedicándose al mundo del ecommerce, gracias a sus estudios en Ingeniería en la Organización de las Empresas, su esfuerzo y constancia en el ámbito laboral, ha conseguido llegar a facturar más de 1 millón de euros al año en sus negocios, más de 2,5 millones de euros desde que empezó a emprender en el dropshipping y 10 millones generados online en global.
El dropshipping le ha dado las herramientas para desarrollar lo que siempre ha querido, desde donde ha querido y con quien ha querido. Además y a pesar de la montaña rusa que dice que es su vida en el ecommerce, tiene el privilegio de observar su crecimiento y autorrealización tanto personal como profesionalmente.
Actualmente cuenta con varias tiendas online en funcionamiento en las que disfruta cada día trabajando y viendo cómo avanzan sus proyectos. Además, y ahora que ha entrado en el club del millón de euros facturados, imparte cursos como coach a futuros nuevos emprendedores a través de su experiencia.
¡Conozcamos su historia!
Contenido
- Sus comienzos
- Todo esfuerzo tiene su recompensa
- Cómo consiguió sus primeras ventas
- El marketing: la pieza fundamental para su negocio
- El mercado al que se dirige
- El envío y las devoluciones en su tienda
- El uso de Shopify
- Qué evitar cuando se empieza en el dropshipping
- Su futuro como dropshipper
- ¿Quieres saber más?
Sus comienzos
Los comienzos de Agustín han sido de lo más variados en cuanto al tipo de emprendimiento. A los 13 años dio sus primeros pinitos como empresario a través de la compra de móviles, que posteriormente vendía por diferentes canales de venta.
Con el paso de los años, cambió de producto y empezó a revender camisetas de equipos deportivos. Únicamente se encargaba de la adquisición y fijación del precio de venta para que posteriormente, gracias a la ayuda de sus familiares, las vendieran a sus conocidos.
Sin embargo, el fracaso llamó a su puerta cuando quiso cambiar la estrategia de venta y pasar del trato personal a la vía online.
“Tuve mi primer error cuando quise vender por internet sin tener ningún tipo de conocimiento sobre cómo hacerlo. Lo hacía todo de manera orgánica, sin anuncios. Al final no conseguí vender nada porque no generé la confianza necesaria a los posibles compradores”.
Fue en 2017, con 23 años, tras inscribirse en un curso para emprendedores ecommerce cuando creó su primera tienda de dropshipping, con la que finalmente, tras mucho esfuerzo, consiguió el éxito que buscaba.
El curso que cambió su forma de emprender
Aunque Agustín tenía unos pilares sobre los que sujetar los cimientos del negocio online con el que tanto había soñado, no fue realmente capaz de explotar todo su potencial como ecommerce hasta que se inscribió en un curso para emprendedores dropshippers.
“Había visto vídeos de lo que era el dropshipping, pero estaban orientados sobre todo al ámbito estadounidense, ya que todavía no estaba tan inculcado este modelo de negocio en España. Cuando me picó la curiosidad, realmente no sabía muy bien lo que era, por eso necesitaba que me guiaran en el camino. Y así lo hicieron”.
Al principio el dropshipping fue un empleo más a su ajetreada vida. Empezó como una manera de generar ingresos extra que realizaba por las noches, momento en el que podía sacar un poco de tiempo después de estudiar entre semana y trabajar en una tienda familiar los fines de semana.
Todo esfuerzo tiene su recompensa
“Llegar a donde estoy ahora ha sido fruto de sacrificar fines de semana, escapadas con amigos, salir de fiesta…pero si quieres algo hay que perseverar y no rendirse para lograr el objetivo que te has marcado”.
Y es que, aunque sus tiendas ya cuentan con grandes ventas y beneficios, su constancia no ha descendido en ningún momento, ya que actualmente afirma que invierte en torno a 15 horas diarias para que su negocio funcione como quiere.
“Es un trabajo continuo porque siempre hay algo en lo que mejorar. Siempre hay nuevos productos para vender, que hay que probar. El dropshipping es un desarrollo continuo, donde si no avanzas es muy probable que tu negocio muera”.
Fallar para mejorar
Si algo ha aprendido el barcelonés durante estos 3 años que lleva dedicándose al dropshipping, es que fallar es algo bueno y necesario para cualquier persona tanto si está emprendiendo como si quiere crecer personalmente.
“Es bueno tropezar y fallar para darse cuenta de los errores y así poder prosperar. Sin embargo, cuando se está fracasando constantemente en un modelo de negocio hay que parar a recapacitar y cambiar a otro”.
Cuando se emprende, es normal que no todo salga rodado desde el primer momento. A pesar de ello, no hay que desistir, sino que hay que fijarse en qué se está fallando, modificarlo y continuar con tu propio objetivo.
El dropshipping es un desarrollo continuo, donde si no avanzas es muy probable que tu negocio muera
“Yo recomiendo que si la gente apuesta por algo, lo haga al 100% y con todos los beneficios y consecuencias. Solo de esta manera podrá descubrir qué es lo que realmente falla en su plan. Hay que insistir, pero de forma consciente”.
Cómo consiguió sus primeras ventas
Agustín recuerda que su “primer comprador” fue su novia, pero por supuesto necesitaba aprender a hacer dropshipping de verdad, yendo más allá de su círculo familiar.
Por ese motivo, para conseguir ventas, cuando escoge un producto intenta lograr, lo que él llama, el efecto ¡WOW!, que consiste en que el producto sea llamativo desde el primer momento para los compradores potenciales.
A parte del efecto ¡WOW!, Agustín utiliza varios trucos para incrementar el número de sus ventas:
- Aplicar las técnicas de la escasez del producto.
- Realizar ofertas especiales y exclusivas al comprador generando confianza
- Realizar campañas mediante el envío de sms o emails donde les recuerdo que han estado interesados por uno de mis productos y no han llegado a comprarlo.
Además, considera muy importante que dicho producto no se pueda encontrar en una tienda física cercana al futuro cliente.
El marketing: la pieza fundamental para su negocio
Cuando Agustín empezó en el mundo del emprendimiento, uno de sus errores fue pretender conseguir un gran número de ventas de manera orgánica. Sin embargo, pronto fue consciente de que si quería conseguir tráfico en su tienda debía invertir y crear estrategias de marketing y publicidad.
Su elección desde el principio fue Facebook Ads, la cual continúa manteniendo gracias al alcance y el impacto que tiene sobre la población.
“El 99% de nuestro medio de captación de clientes a nuestras tiendas es a través de Facebook Ads. Para nosotros el marketing es una inversión y no es un gasto, pero siempre, antes de lanzar una campaña, estudiamos todas las métricas para conocer el coste que nos va a suponer”.
El mercado al que se dirige
Cuando Agustín tuvo que decidir quiénes iban a ser los compradores a los que se iba a dirigir y el mercado que iba a escoger lo tuvo claro. Sus tiendas están dirigidas a una población comprendida entre los 30 y los 50 años, pues es consciente de que son las personas con mayor poder adquisitivo.
En un primer momento, su negocio estuvo dirigido a la población española, pero sus ganas de prosperar le llevaron a expandirse hacia latinoamérica, donde lleva en torno a un año y medio realizando dropshipping.
Cierto es, que desde el desconocimiento quiso abarcar diferentes países sudamericanos aplicando una misma técnica, pero los datos que estaba adquiriendo no eran tan buenos como esperaba, pues no estaba considerando las necesidades específicas de la población de cada país.
Tras estudiar las cifras, se fijó que México era uno de los países que le reportaba mejores beneficios respecto a los otros a los que también se había dirigido con sus tiendas.
De esta forma, centró su potencial en él y tras publicar un anuncio personalizado y dirigido concretamente a la población mexicana, vio que las ventas aumentaban considerablemente.
“Una de las claves para conseguir mayor número de ventas es hacer creer a los clientes que la tienda se encuentra en su país. Esto es muy importante, pues la cercanía genera una confianza en el comprador a la hora de que le resuelvan cualquier tipo de problema”.
Agustín es consciente, gracias a un estudio en el que comparaba el dropshipping internacional vs el dropshipping en los Estados Unidos, de que el nivel adquisitivo en México no es tan alto como en Estados Unidos y la gente no está tan familiarizada con la compra online.
A pesar de ello, también tiene su lado positivo, pues tiene menos competencia y compensa la desconfianza de la población con el abaratamiento de la publicidad que realiza, lo cual le permite lograr más ventas con una inversión menor.
El envío y las devoluciones en su tienda
Si bien cada dropshipper tiene su método para enviar y devolver productos, Agustín lo hace a través de lo que él llama el método híbrido. Esto es una combinación entre los envíos tradicionales que ofrece la página de la que escoge sus productos y la incorporación adicional de diferentes posibilidades de envío que pone a disposición del cliente.
“Con el sistema híbrido le das al cliente la posibilidad de elegir si quiere el envío express, el envío lento o uno intermedio. También en España nosotros hemos incorporado el envío contrareembolso, pues continúa implantado en la sociedad debido a una larga tradición que comenzó con la teletienda”.
Para Agustín es tan importante que el producto sea de calidad como que el servicio al cliente, pues, de esta forma, hace que la experiencia del consumidor sea todavía mejor al tener en cuenta las necesidades que exige cada mercado al que se dirige.
En cuanto a las devoluciones Agustín apuesta por una política flexible. Si bien, cuando alguno de sus compradores quiere entregar de vuelta uno de sus productos, les pide que realicen un vídeo mostrando el defecto. De esta forma, puede tomar medidas de por qué el producto está dañado y así resolverlo con la mayor eficacia posible.
El uso de Shopify
“Yo utilizo Shopify para 3 de mis 4 tiendas activas'. A Agustín le gusta mucho esta plataforma porque le resulta muy intuitiva y porque el curso que lo formó la utilizaba a la hora de enseñarle.
Si algo tiene él en claro es que para crear una tienda desde 0 sin tener ningún tipo de conocimiento sobre el dropshipping, una de las mejores apuestas que se pueden realizar, igual que hizo él, es el uso de Shopify, pues su uso es tan sencillo que no es necesario contratar a nadie que diseñe tu negocio online a tu gusto.
“Crear tu tienda con Shopify es tan fácil como escribir lo que quieres y colocarlo donde más te guste. Además, cuenta con muchas aplicaciones que te permiten hacer de todo'. Por ejemplo, puedes hacer dropshipping con DSers, que te permite incorporar los productos que quieres de AliExpress de forma automatizada con un solo click”.
Qué evitar cuando se empieza en el dropshipping
Cuando se está empezando en el mundo del dropshipping, los emprendedores novatos suelen tener muchas dudas sobre qué es lo que deberían o no hacer para no fracasar.
“Si tuviera que hablar con mi yo de hace 3 años le diría que se centrarse en un nicho de mercado concreto, en un producto específico y que simplifique todo al máximo”.
Para empezar, escoger un buen país en el que vender es algo tan fundamental como escoger el rango de edad al que se quiere dirigir un negocio. De esta forma, es más fácil tomar futuras decisiones respecto a una tienda.
Por otro lado, Agustín recomienda que de primeras se apueste por un producto ganador, aunque luego se cuente con diferentes modelos de ese producto. Así, toda la atención estará enfocada en una cosa y habrá menos probabilidades de fracasar.
Cuando escoges un producto intenta lograr el efecto ¡WOW!, es decir que el producto sea llamativo desde el primer momento
“Yo recomiendo que si estás empezando pruebes con un producto durante 7 días, si durante este margen de tiempo no funciona, lo cambias por otro. Básicamente, es probar productos de uno en uno hasta conseguir el ganador”.
Así es como él lo hizo hasta que, tras 8 meses de constantes pruebas, dio con el producto ganador que tanto buscaba. Sin embargo, cuenta que con el paso de los años esta selección se vuelve más sencilla y es posible testar diferentes productos de una sola vez.
Y esto es lo que quiere transmitir a todas aquellas personas que acuden a él para que les enseñe a través de sus coach. Igual que en su día él Agustín también fue alumno, pretende mostrar a los futuros dropshippers que el camino al éxito es duro, pero que con trabajo y constancia se pueden conseguir las metas que uno se propongan.
Su futuro como dropshipper
Aunque este dropshipper no tiene en mente montar su propia escuela, sí que quiere continuar impartiendo clases como coach, donde ayuda y comparte su experiencia personal en los cursos dirigidos a futuros emprendedores.
Además, tiene la intención de abarcar nuevos proyectos que funcionen igual de bien que los que tiene actualmente. Y a pesar de que no quiere, por el momento, abrir su propia tienda física, sí que está entre sus proyectos externalizar sus almacenes a otros clientes para automatizar los procesos de envío.
Si te ha gustado su historia y quieres conocer más sobre su historia no dudes en dejar un comentario. Haznos saber qué otros aspectos te gustaría saber sobre este exitoso dropshipper que ha superado el millón de euros facturados.